¿Quiénes somos?
La vocación de servicio, la humildad y la transparencia del "Testigo" son los pilares que inspiran la travesía de la REAL COFRADÍA PENITENCIAL DEL SANTÍSIMO CRISTO DESPOJADO, CRISTO CAMINO DEL CALVARIO Y NUESTRA SEÑORA DE LA AMARGURA.
Los ideales inspiradores de los jóvenes de la Juventud Obrera Católica (JOC), que fundaron la Cofradía del “Santo Cristo del Despojo” el 23 de diciembre de 1943, permanecen intactos y vigentes, a pesar de la desvinculación jurídica de dicha organización en 1967.
Los templos de San Felipe Neri, El Salvador y San Andrés Apóstol son testigos vibrantes de esta historia, al igual que los conjuntos escultóricos destinados a perdurar en las procesiones de esta Cofradía: “Camino del Calvario” y “Preparativos para la Crucifixión”.
Actualmente, la Cofradía sostiene vivo el culto a sus imágenes titulares, que, mediante un esfuerzo colectivo, contribuyen al enriquecimiento de la Semana Santa de Valladolid. Los cofrades y la comunidad cristiana acompañan con gran devoción al “Santísimo Cristo Despojado”, a “Cristo Camino del Calvario” y a “Nuestra Señora de la Amargura” en cada una de sus salidas procesionales.
Entre las procesiones con profundas raíces, destacan la del “Encuentro” desde 1958, la de “Nuestra Señora de la Amargura y Cristo Despojado” desde 1951, la del “Rosario” desde 1958, y más recientemente, la de los “Siete Dolores” en Cuaresma.
El “Cristo de la Fe”, obra de un talentoso cofrade , simboliza la fe del pueblo creyente y acompaña nuestro recorrido espiritual. Además, la Inmaculada Concepción, patrona de la Cofradía, resalta nuestra vocación mariana.
La búsqueda de una fe personal y renovadora, junto a la singularidad de ser la única Cofradía que procesiona sin capirote, manifiestan su esencia de ser testigos públicos de Jesús desde su fundación sin capirote, “a cara descubierta”.
Innovadora pues, nos orgullecemos de ser la primera en la ciudad en contar con una Banda propia de cornetas y tambores, de dar la bienvenida a la mujer en la labor de portadoras de andas, de organizar importantes exposiciones sobre la Semana Santa, y presentando anualmente un nuevo Paño de la Verónica.
En resumen, una Cofradía con una rica historia, un presente destacado y un firme anhelo de futuro.
